Las Fobias, son miedos irracionales y muy intensos a algunas situaciones o cosas muy concretas que, generalmente es muy poco probable que nos hagan daño a menos de que sean animales salvajes. Se convierten en un verdadero problema psicológico cuando limitan nuestra vida de una manera radical, pensar en cómo a los niños les atemoriza la oscuridad, podría ser un ejemplo claro de su intervención en el desarrollo cotidiano de las personas. La proximidad física con ese objeto o situación provoca casi de manera invariable una respuesta inmediata de ansiedad. Estados de alerta, Sudores, pulso acelerado, nudo en el estómago, temblor de manos y piernas son de los síntomas más frecuentes cuando la persona que tiene una fobia específica ha de acercarse a ese objeto o situaciones temidas.
Ataxofobia: miedo al desorden |
Las personas con una fobia hacen todo lo posible por evitar un peligro percibido, que es mucho mayor en sus mentes que en la vida real. Si es confrontado con la fuente de su fobia, la persona sufrirá una angustia enorme, que puede interferir en su funcionamiento normal, a veces puede conducir al pánico total. Para algunas personas, incluso pensar en su fobia es altamente angustioso.Una fobia se inicia cuando una persona comienza a organizar su vida procurando evitar el objeto de su miedo. Una fobia es mucho más grave que un simple miedo. Quienes la padecen tienen una necesidad irresistible de abstenerse de todo aquello que puede desencadenar su ansiedad .Si el objeto de la fobia es algo con lo que la persona entra muy rara vez en contacto, como las serpientes, su vida cotidiana no se verá afectada. Sin embargo, algunas fobias complejas son imposibles de evitar, como la agorafobia (miedo a salir de casa o a lugares públicos) o fobia social (miedo a estar entre grupos de personas).
